jueves, 20 de agosto de 2009

OLPC en Latinoamérica

El proyecto OLPC (One Laptop per Child) toma fuerza en países de centro y sudamérica, levantándose potencialmente en Uruguay; como es sabido dicho proyecto fue adoptado a nivel federal, por lo que cada niño inscrito al sistema educativo de educación básica en ese país tendrá "no el privilegio" sino el derecho de tener una herramienta poderosa con la que podrá experimentar, jugar y aprender a través de una plataforma ya no del futuro, sino del presente.

Otro país que ha tenido el coraje, la decisión y la voluntad de adoptar el proyecto es Nicaragua, esta vez por parte de la iniciativa privada a través de la Fundación Zamora-Terán misma que emerge como iniciativa de responsabilidad social del Grupo LAFISE-Bancentro que ha adquirido 5,000 laptops XO; en la etapa inicial serán repartidas 1,500 laptops cubriendo un total de 6 escuelas, una de ellas presenta un escenario particular ya que se ubica en una isleta donde no cuentan con luz, ni internet, todo un reto para el equipo local de implementación; no cabe duda que la laptop XO pretende estar realmente en las manos de cada niño no importando las inconveniencias geográficas.

La Fundación Zamora-Terán pretende ser la concentradora de esfuerzos para continuar dotando de laptops a cada niño en el país, a través del apoyo y sustento de empresas locales, en las que figuran las afiliadas a la Cámara de Comercio Americana de Nicaragua (AMCHAM), este es un ejemplo de unión y solidaridad que demuestra que emprender proyectos de esta magnitud no solo son realizables a cargo de las instancias gubernamentales.

Comparto algunas ligas relacionadas con los actuales despliegues de laptops XO por los países ya mencionados:

* En Nicaragua
http://www.laprensa.com.ni/archivo/2009/agosto/20/noticias/nacionales/344690.shtml


* En Uruguay (donde el Presidente Calderón hizó entrega simbólica de la laptop XO número 300,000 del Plan Ceibal, durante su visita en ese país)
http://www.presidencia.gub.uy/_Web/noticias/2009/08/2009081407.htm

Así mismo quisiera compartir un artículo publicado recientemente por Jorge Castañeda, reconocido analista político de nuestro país.
http://www.diario.com.mx/nota.php?notaid=69657de3bb507332b794d849c2720645

martes, 26 de mayo de 2009

Reflexionemos...y ¡Actuemos!

Mientras otros países están asumiendo la responsabilidad de proveer herramientas tecnológicas a la nueva generación de niños, dándoles acceso al mundo de la información, disminuyendo la brecha digital; otros más como México aún no reaccionan ante la realidad de los siguientes años, donde la economía tiende a basarse no en la exportación-importación de materia prima, sino en la interacción e intercambio globalizado del conocimiento, es por ello que considero importante citar el artículo escrito por Rodrigo Arboleda H. Presidente y CEO de Ibero-América y El caribe para la Asociación One Laptop per Child (OLPC).


Una vacuna contra la ignorancia


Los médicos adquieren instintos que el resto de los mortales no tenemos. Uno de ellos es el sentido de la urgencia. Saben que si no actúan rápido el paciente se les puede morir.

Aquellos que trabajan con epidemias adquieren adicionalmente la necesidad de buscar antídotos o vacunas. Buscan, investigan, experimentan y si no son ellos los que las descubren, saben quién lo ha hecho. Y cuando finalmente encuentran una, se les dispara un tercer y contundente instinto, el de vacunar a todo ser humano que se les atraviese por su lado. El caso que más se nos viene a todos a la cabeza es el de la vacuna Salk contra la epidemia del polio.

Se necesitó entonces que un médico, oncólogo para más datos, quien todavía practica su medicina los viernes de cada semana y por caprichos del destino y vaya uno a saber por qué otro bicho que lo picó, se metió a la política y llego a ser presidente de su país, hubiera tenido el olfato de descubrir que había una vacuna que nadie más había detectado y decidió aplicarla a toda la población que la necesitaba. Descubrió la vacuna contra la ignorancia!

El médico del que hablamos es el Doctor Tabaré Vásquez, presidente de Uruguay. Los pacientes, los chicos de primaria de su país.

Hace unos dos años largos se enteró en Davos, Suiza, del proyecto “One Laptop Per Child” o “Un Portátil Para Cada Niño” cuando Nicholas Negroponte lo presentó ante el World Economic Forum. El proyecto, que como su nombre lo dice aspiraba a dotar con un portátil a cada niño en edad escolar de primaria, pero conectado al Internet de alta velocidad y banda ancha, se presentó como una verdadera revolución educativa y una redención para los países en vías de desarrollo. Tabaré Vásquez entendió inmediatamente, sin que nadie se lo hiciera notar, que este proyecto proporcionaba lo más cercano que había encontrado como antídoto o vacuna contra la ignorancia. Hablamos de esa ignorancia crasa que genera miseria y esa miseria extrema que lleva a las gentes a la violencia. Ese mal endémico, esa patología crónica que se ha convertido en la maldición de los países en vías de desarrollo.

Hizo cuentas rápidas; Uruguay, tiene más o menos 3,700,000 habitantes, con unos 260,000 chicos en edad escolar de primaria. Regresó a su país y sin pensarlo mucho ni hacer muchísimos estudios de factibilidad, ni crear comisiones de notables ni paneles de expertos que discutieran hasta la saciedad la bondad o maldad de una vacuna de este tipo, armado simple y llanamente con su instinto de médico, de uno que tiene ese sentido de la urgencia y el de vacunar a las gentes cuando se encuentra una vacuna efectiva contra una epidemia, ordenó precisamente 260,000 portátiles y toda la parafernalia necesaria para conectarlos al Internet de alta velocidad y banda ancha.

Entre el momento en que escuchó la propuesta de Negroponte y la llegada a puerto Uruguayo de los primeros portátiles pasó menos de un año.

Un año y tres meses después de la llegada del primer portátil a suelo Uruguayo, la transformación de la sociedad es evidente. Se han entregado más de 170,000 portátiles, con una eficiencia y velocidad que en la actualidad ronda en los 1,500 portátiles diarios entregados a los docentes y a los estudiantes de primaria. Los chicos son los dueños de los portátiles. Los llevan a sus casas y en muchos casos son ellos los que están enseñando a sus padres pues muchos de estos nunca fueron a la escuela y no saben leer ni escribir. No se han perdido, ni robado ni vendido ni empeñado casi ninguno pues un inteligente sistema de control posibilita el poder desactivarlo a control remoto por lo que el portátil de ahí en adelante sirve solo como un ladrillo que sirve de pisa papel. Se ha duplicado en muchos casos la asistencia escolar. Se ha minimizado la deserción de estudiantes, se ha observado aumentos hasta del 50% en el número de horas que los chicos permanecen en la escuela.

Para poder entregar un portátil, se lleva a cabo intensos procesos previos de inducción y entrenamiento a los docentes quienes son los primeros en recibir un portátil de estos y, obviamente, con los alumnos. Las escuelas deben haberse dotado de un servidor, de los puntos de acceso de la señal de Internet y estabilizado la corriente eléctrica. Los portátiles vienen con hasta 200 libros de todo tipo, gratis, escogidos por el país respectivo y constituyen un ahorro monumental de dinero que facilita la financiación.

Para Septiembre de este año, Uruguay será el primer país del mundo en el cual la totalidad de los niños de primaria tendrán un portátil personal conectado al Internet de banda ancha. Si la conocíamos como la “Suiza de América”, tendremos que cambiarle el slogan porque tocará llamarla la “Finlandia de América” o mejor tal vez, llamar a una Finlandia “La Uruguay de Europa” porque ningún país del viejo continente podrá darse el lujo de decir, como lo puede decir Uruguay, que tiene vacunados a todos sus niños de primaria contra la epidemia de la ignorancia!

Reflexionemos...y ¡Actuemos!

Si deseas colaborar en la difusión del proyecto o conoces a alguien que quiera patrocinar la dotación de laptops en tu Comunidad, Ciudad o Estado, favor de escribir al correo electrónico xoenmexico@gmail.com para asesorte y aclarar tus dudas.